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INFONAVIT y la Nueva Reforma: ¿Un Cambio Necesario o un Dolor de Cabeza para los Patrones?

Si tienes empleados o eres trabajador con un crédito INFONAVIT, presta atención porque el 22 de febrero de 2025 entra en vigor una reforma a la Ley del INFONAVIT que puede cambiar la manera en que se manejan los descuentos en tu nómina. Y como toda reforma, viene con su buena dosis de dudas, retos y, para qué negarlo, dolores de cabeza.

¿De qué va esta reforma?

En palabras simples, antes, si un trabajador estaba ausente o incapacitado y no recibía salario, el patrón suspendía los descuentos de INFONAVIT. Ahora, con la nueva reforma, los patrones están obligados a seguir realizando los descuentos, aunque el trabajador no tenga ingresos en ese periodo. Sí, suena complicado, porque, ¿cómo descuentas algo de un salario que no existe?

Esto genera una serie de preguntas importantes:

  • ¿Quién absorberá ese pago en caso de ausencia o incapacidad?

  • ¿Los patrones tendrán que cubrirlo temporalmente?

  • ¿Podrán recuperarlo después sin caer en ilegalidades?

  • ¿Cómo se reflejará esto en los sistemas de nómina?

Y lo más importante… ¿estamos listos para aplicar esta reforma de manera efectiva?

Lo que cambia con la reforma

Antes: Si un trabajador no tenía salario en un periodo (por ausencia o incapacidad), no se hacían descuentos de INFONAVIT.

Después: Ahora el patrón deberá realizar el descuento, sin importar si hay salario o no.

Esto plantea un problema mayor si consideramos a los trabajadores con incapacidades prolongadas. Supongamos que un trabajador está incapacitado tres meses y recibe el 60% de su salario por parte del IMSS. ¿El patrón tendrá que pagar el crédito INFONAVIT de su bolsa? Técnicamente, sí. Y eso puede representar un golpe fuerte a las finanzas de las empresas.

¿Qué significa esto para patrones y trabajadores?

Para los patrones:

  • Costos no previstos: Si el trabajador no tiene salario en un periodo, el patrón podría verse obligado a pagar el descuento sin certeza de recuperarlo.

  • Ajustes en los sistemas de nómina: Las plataformas actuales no están diseñadas para manejar descuentos sin base salarial. Esto requiere actualizaciones y pruebas que no se hacen de la noche a la mañana.

Para los trabajadores:

  • Protección del crédito: Evita que se acumulen intereses y se genere un retraso en los pagos.

  • Riesgo de conflictos laborales: Si el patrón intenta recuperar el pago cuando el trabajador regrese, podría caer en violaciones a la Ley Federal del Trabajo.

El problema con la implementación

Una cosa es que la reforma entre en vigor y otra que se pueda aplicar correctamente. Aquí hay un detalle importante: los sistemas que usan las empresas para reportar pagos y descuentos, como el Sistema Único de Autodeterminación (SUA) y el Sistema de Intercomunicación de Avisos (SIA) del INFONAVIT, aún no han sido actualizados con estos cambios. Sin estas actualizaciones, no hay forma de cumplir con la ley correctamente.

Para agregar más confusión, la propia reforma establece que INFONAVIT tiene hasta 360 días para emitir las disposiciones complementarias. Entonces, si los patrones deben cumplir desde febrero de 2025, pero INFONAVIT puede tardar un año en emitir las reglas, ¿qué se supone que deben hacer las empresas en el intermedio?

Falta de claridad y riesgos

Este cambio trae consigo muchas preguntas sin respuesta:

  • ¿Qué pasa si un trabajador renuncia o es despedido mientras está incapacitado?

  • ¿Cómo se manejarán los descuentos en casos de pensión alimenticia?

  • ¿Cómo recuperará el patrón los pagos hechos en ausencia de salario sin violar la ley?

Lo cierto es que si las autoridades no aclaran estos puntos pronto, esto podría derivar en conflictos laborales, problemas operativos y hasta demandas por parte de los trabajadores.

Recomendaciones para empresas y autoridades

Para evitar el caos, tanto las empresas como las autoridades deben actuar rápido. Aquí algunos pasos clave:

Lo que deben hacer las autoridades:

  • Aclarar el alcance de la reforma: Definir si los patrones deben absorber el costo o si existe una manera legal de recuperarlo.

  • Actualizar los sistemas oficiales (SUA y SIA): Sin esto, no se puede aplicar la reforma correctamente.

  • Emitir guías prácticas: Casos concretos sobre cómo proceder en distintas situaciones ayudarían a los empleadores a entender qué hacer.

Lo que deben hacer los patrones:

  • Actualizar los sistemas de nómina: Coordinar con proveedores de software para adaptar sus sistemas antes de la entrada en vigor.

  • Revisar contratos laborales: Incluir cláusulas sobre el manejo de descuentos en periodos de ausencia.

  • Capacitar a su personal de Recursos Humanos: Para que puedan explicar los cambios a los trabajadores y evitar malos entendidos.

  • Prever reservas financieras: Para cubrir posibles pagos extraordinarios en caso de incapacidades prolongadas.

Conclusión

La intención de la reforma es buena: evitar que los trabajadores se atrasen en sus créditos por ausencias o incapacidades. Sin embargo, su implementación es complicada y genera más dudas que certezas. Si INFONAVIT y la Secretaría del Trabajo no emiten pronto lineamientos claros y actualizan sus sistemas, este cambio puede convertirse en un problema serio para miles de empresas en México.

Por ahora, lo mejor que pueden hacer los patrones es prepararse y estar atentos a los próximos comunicados oficiales. Y para los trabajadores, es recomendable informarse bien y preguntar a su empresa cómo manejarán este cambio.

El 22 de febrero de 2025 está a la vuelta de la esquina… ¿estamos listos?